Misery - Stephen King
By Daniel Sepúlveda
Misery fue la primera novela que leí de Stephen King. Recuerdo que la compré en Ulibro, la feria del libro de mi ciudad, porque me había llamado mucho la atención su portada: Una mano ensangrentada que se resbala en un tipo de vidrio o ventana.
En esa época no sabía quién era Stephen King, sólo sabía que quería leer una historia que me enganchara y me mantuviera entretenido un rato. Pues amigos, dejenme decirles que “Misery” logró su objetivo.
¿Quieren saber por qué? ¡Comencemos!
1. Sinópsis
Estaba loca, pero él la necesitaba.
Paul Sheldon es un escritor que sufre un grave accidente y recobra el conocimiento en una apartada casa, donde vive una misteriosa mujer, capaz de cometer los mayores horrores.
Paul tendrá que luchar por su vida.
Misery Chastain ha muerto. Paul Sheldon la ha matado. Con alivio y hasta con alegría. Misery lo ha hecho rico. Porque Misery es la protagonista de sus exitosos libros.
Paul quiere volver a escribir. Algo diferente, algo auténtico. Pero entonces sufre un accidente y despierta inmóvil y atravesado por el dolor en una cama que no es la suya, tampoco la de un hospital.
Annie Wilkes lo ha recogido y lo ha traído a su remota casa de la montaña. La buena noticia es que Annie había sido enfermera y tiene medicamentos analgésicos. La mala es que durante mucho tiempo ha sido la fan número uno de Paul. Y cuando descubre lo que le ha hecho a Misery Chastain, no le gusta. No le gusta en absoluto.
Antes, Paul Sheldon escribía para ganarse la vida. Ahora, Paul Sheldon escribe para sobrevivir.
2. Opinión
Puntaje: 4.7 Estrellas
Por fin puedo traerles la reseña de Misery, el primer libro que leí de Stephen King y con el que me convencí de que este es un autor al que debería seguir leyendo.
Hablemos primero de Annie Wilkes, una de las antagonistas más terroríficas que he leído en mi vida. He leído más de dos docenas de libros de terror después de Misery y fácilmente puedo asegurar que pocos antagonistas han provocado tal sensación de miedo y tensión como lo ha hecho Annie. Su crueldad, su bipolaridad y la forma en como le recuerda a Paul que ella es quien tiene el control, la convierten en un personaje inolvidable y que sin duda nunca querría conocer en persona.
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La narración de King en esta novela es fabulosa, pues realmente logras sentir que eres Paul Sheldon, acostado en esa cama y escribiendo la novela en esa máquina de escribir. Sientes el temor cuando escuchas los pasos de Annie, el pinchazo que te provocan las inyecciones, y hasta eres consiente de los olores y sonidos que son descritos en estas páginas. Seas o no escritor, no hay forma de no sentirse en el papel de Paul.
Ahora, hablemos de lo que no me gusto y que, según he escuchado de muchos compañeros lectores, es una opinión muy popular: Los capítulos en los que King nos narra la historia que está escribiendo Paul Sheldon son un relleno absolutamente innecesario y aburrido. En el momento en que leí este libro no me adelanté absolutamente nada, pues era un lector principiante y me sentía como un pecador impío si hacía tal cosa.
Obviamente de haberlo leído actualmente si me lo hubiera saltado sin ningún problema. ¡No te pierdes de nada! Ahora es probable que esa historia tenga conexión con otra novela de King o incluso con la Torre Oscura? Sí, tal vez, pero honestamente no es relevante. Si quieres conocer referencias y conexiones, búscalas por internet y ahórrate el relleno de Misery.
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Y como ese era el único punto que no me gusto del libro, podemos regresar a las cosas maravillosas: las escenas finales del libro. Qué adrenalina, qué suspenso, qué tensión, que todo! Stephen King me tuvo literalmente en el filo de mi asiento durante todas estas escenas, rogando para que el pobre Paul Sheldon lograra escapar.
Recomiendo mucho este libro, en especial para aquellos que no hayan leído aún a King y quieran iniciar con su obra. Tanto Misery como Carrie son opciones perfectas para los nuevos lectores del maestro del terror.